3 consejos para preparar la canastilla

Cuando se descubre que se está embarazada da inicio un periodo en el que, entre otras muchas cosas, hay que preparar la llegada del bebé. Eso supone desde comprar la cuna hasta adquirir el carrito o la sillita para el coche. No obstante, una de las acciones más importantes que hay que llevar a cabo es la preparación de la canastilla, que viene a ser el conjunto de artículos que se necesitan llevar al hospital cuando vaya a nacer el pequeño.

Para poder organizarla perfectamente y para conseguir que no le falte nada, lo mejor es seguir estos consejos que exponemos a continuación:

1-Tejidos

Una de las partes fundamentales de la canastilla será el conjunto de prendas de vestir del bebé. En este sentido, es imprescindible que se apueste por las que sean de algodón o de perlé. ¿Por qué? Porque la piel de los recién nacidos es muy sensible y si se usan de otro material puede suceder que el niño presente alergias. Por eso, es imprescindible, por ejemplo, no incluir ninguna prenda que sea de lana de angora.

2-Lavado

Igual que es imprescindible elegir bien los tejidos de las prendas de ropa del bebé, es importante que antes de colocar esas en la canastilla se lleven a cabo los siguientes pasos:

• Se deben cortar todas y cada una de las etiquetas que tengan. De esta manera se evita que el bebé pueda sentirse molesto.

• Es vital además lavarlas todas, para que así estén mucho más suaves y para que se elimine cualquier resto de suciedad que tengan. Eso sí, hay que tener en cuenta que esta acción debe llevarse a cabo con jabón neutro y sin suavizante, pues es la forma de que no se pueda irritar la piel del niño.

3-Ajuar básico

Entre tres y cinco días, según si el parto ha sido natural o por cesárea, es el tiempo que, de manera habitual, la madre y el pequeño pasan en el hospital. Por eso, hay que llevar la cantidad de ropa adecuada para esa estancia. De ahí que a la hora de preparar la canastilla se deba tener en cuenta ese periodo y no se incluyan en la misma más artículos de la cuenta. En concreto, se considera que el ajuar básico de un niño debe estar compuesto de los productos siguientes:

• Varios bodies, que se recomienda que sean de los que se abrochan lateralmente porque son más fáciles de quitar y poner.

• Pijamas o peleles, teniendo en cuenta siempre la época del año que sea.

• Calcetines, para que no se le enfríen los pies.

• Baberos.

• Pañales de la talla correspondiente, es decir, de la más pequeña que haya en el mercado.

• Toallitas húmedas, que son necesarias cuando se le cambia el pañal. Especialmente importantes son estas en las primeras horas de vida del niño ya que expulsará el citado meconio que le ensucia mucho.

• Mantita, tanto para arroparlo al salir del baño como para cuando se vaya a salir del hospital.

• En el caso de que el bebé nazca en épocas frías del año, es imprescindible además que se incluyan tanto gorritos como manoplas.